Blogia
España en el diván

Miles de jóvenes secundan sentadas para exigir viviendas

Miles de jóvenes secundan sentadas para exigir viviendas Mientras los ayuntamientos se financien con la venta de suelo, las viviendas seguirán encareciéndose. Los jóvenes se acomodan con músicas celestiales, pretendiendo que su tenue exigencia tenga carácter premonitorio, pero tan sólo recibirán la migaja de una pobre subvención o la esperanza de un número en una rifa de casas baratas. Una sola generación no cambiará las cosas, pero harían bien en exigir justicia y no favores y dádivas. El griterío se contamina con reclamaciones tópicas cuya unanimidad resulta sospechosa. La inmediata obligación de cualquier joven es ser radical, analizar la raíz de los problemas y determinar su voluntad de resolverlos. Revolver la ceniza no avivará el fuego.

5 comentarios

Veobesillo -

¿Donde está la crítica, Silvia? Yo no las veo, ni en el blog, ni en los comentarios. Mas bien, entiendo que Rial dice lo contrario. Por mi parte, ya que no quedó claro, decirte que los sin-casa tienen todo mi respeto y mi apoyo, y que mi culo estará en la próxima sentada.

Silvia -

Me parece superfuerte que critiqueis nuestra sentada. Típicos burgueses que sguro que ya teneis casa. Nosotros seguiremos protestando.

Veobesillo -

¡Bien dicho, Rial! Aunque con una más que abundante colaboración de todo quisqui que tenga ahorros, los ayuntamientos son los principales especuladores de este país. Se les concedieron potestades urbanisticas para que controlasen el uso desaforado del suelo, la masificación, y la especulación, pensando que un control local de cada caso sería preferible al central de toda la vida. El resultado ha sido que los ediles de turno, ora por incompetencia (tardando años en elaborar los planes urbanísticos), ora por afan de lucro (vease Marbella), han trabajado a favor de los especuladores, recortando la disponibilidad de suelo para la vivienda. Si a eso le sumamos la obsesión de todos los españoles pudientes por comprar cuantas casas les sea posible (por el bien de sus hijos, faltaría más) se comprende la situación actual: Las personas jóvenes que desean adquirir su primera vivienda, tienen que pagar toda la especulación, la incompetencia y las plusvalias de los pudientes. Lo único bueno es que, como cedimos la soberanía monetaria hace años al Banco Central Europeo, los tipos de interés no son los abusivos de hace quince años y nos podemos hipotecar mucho más y por muchísimo más tiempo; ¡menos mal!.

Remartín -

Estoy de acuerdo con Marta, aunque lo que ha dicho es hoy pecado (socialmente hablando). La solución de los pisos de 2 m. cuadrados puede ser mas barata, y muy cómoda, según algunos ministros.

Marta -

Yo soy becaria precaria y aunque no hice la sentada les apoyo. No hay derecho a que no nosd subvencionen los pisos y sí lo hagan con los inmigrates.