Cuide su semen, puede afectar a sus hijos
Una investigación científica prueba que los padres que fuman, beben alcohol o se exponen a algún tipo de tóxico pueden alterar los genes de sus espermatozoides y el daño se mantiene hasta cuatro generaciones posteriores. Cada vez se estrecha más la posibilidad de ser inocentes. Lo que hacemos mal tiene un eco que llega a nuestros biznietos, que serán más frágiles de lo que nosotros somos ahora. Los placeres nos hacen cada vez más culpables, más sospechosos de asesinatos ulteriores y de los que hasta ahora no teníamos conciencia alguna. La diversión se acaba cuando hemos de afrontar la dulce mirada de nuestro bebé reprochándonos que no hayamos comido hortalizas. La genética nos hace inmortales y la vida no es ya sólo nuestra. Habrá que joderse y dejar como mejor herencia un semen limpio de polvo y paja.
1 comentario
María -